No somos influencers, somos artistas: Defendiendo el valor del arte.
![]() |
Los algoritmos no ayudan a los artistas. Imagen ilustrativa de una artista trabajando. |
Instagram no quiere arte, quiere show
Pero si alguien graba cómo salpica pintura con una esponja sobre un fondo blanco, con una canción viral de fondo y tipografía trendy diciendo “Así me relajo mientras pinto”, entonces sí… 20.000 likes.
Es así y por más que sea chocante lo tengo que decir. Instagram, y muchas redes más, no valoran el arte. Valoran el espectáculo. Y si no tenés luces LED, materiales de arte ultra caros, cámara 4K y una habitación estética, no existís.
¿Querés ser artista sin invertir? Éxitos con eso.
Me afloja que la gente repite todo el tiempo:
“Solo hace falta talento.”
“Con cualquier cosa se puede crear.”
“Lo importante es la creatividad.”
Sí, claro… hasta que querés mostrar tu trabajo.
Porque si muestras tus lápices escolares, nadie te toma en serio. Porque si usás una Wacom antigua conectada al PC, “no es lo mismo” que dibujar en Procreate. Porque si no hacés speedpaints editados con música linda, no sos "creador de contenido". Porque si pedís $5 dólares en Ko-fi, te miran como si pidieras una fortuna.
Pero claro, pensa un poco: ¿Cuánto cuesta un set de marcadores buenos? ¿Cuánto cuesta un buen papel para acuarela? ¿Cuánto cuesta una stylus decente o una app digital profesional?
El arte NO es gratuito. Y mucho menos lo es el trabajo de hacer arte en el 2025, con la presión de tener que gustarle a un algoritmo para que alguien te vea.
No quiero ser influencer. Quiero ser artista.
No vine a jugar con los filtros. Vine a crear con mis manos, con mis colores, con mi historia. Eso debería tener valor.
No importa si mis herramientas no son “las mejores del mercado. No importa si no tengo setup blanco con plantas colgantes. No importa si uso un celular barato para grabar. Mi arte no es menos por eso.
Y si vos también estás ahí…
Si estás peleando con materiales limitados, haciendo magia con lo que tenés, sintiéndote invisible en redes, preguntándote si vale la pena. Quiero que sepas esto:
No estás sol@. No estás loc@ por frustrarte.
No estás mal por cansarte. Y no estás equivocad@ por defender tu arte, incluso cuando no te lo quieren pagar y te piden dibujos gratis.
Y llegamos a este punto: ¿Entonces qué hago?
Seguí con lo que tengas, seguí como puedas. Mientras avanzas armate de a poco un espacio donde vos mandás: un blog, un DeviantArt, un canal que no dependa de trends ni bailes ni filtros.
No somos influencers. Somos artistas. Y eso también merece espacio, respeto y visibilidad.
Gracias por leer.
Si esto te resonó, compartilo. Porque alguien más necesita leerlo también.
Mar Jimenez F
Comentarios
Publicar un comentario
¡Gracias por dejar tu comentario! Me encantará leerte.